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19 de enero de 2011

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la vendedora de choclos
va y viene con su hija

cómo no le pone un
gorrito gritan las señoras
aunque sea que le moje
el cabello dicen

pero la nena
se moja cada dos o tres cuadras:
se mete al mar y sigue a la madre
pataleando la arena de la orilla

cómo no le pone protector dicen
las señoras pero la vendedora
odia las cremas
que la hacen transpirar
ellas se ponen crema luego
en casa
después de la ducha
después de rendirle sirvasé
tanto y
tanto la venta
al dueño del carro y de los choclos

pero por qué no la deja con
alguien que la cuide pobre
criatura caminando todo el día
dicen las señoras cuando ven a
la nena sentada a la sombra del
carro (1) la mujer mirando el mar
pasándose un trapo por el cuerpo

(1) eso querría la vendedora pero
la que le iba a cuidar la nena
enganchó laburo en los baños de
un balneario y los horarios
se le superponían

y el padre hermano tío
tía suegra primos todos?
tirando carros a saber: pancho
ensalada fresca chipá batidos
trenzas pizza en cono bolas
de fraile

día por medio sin embargo
la nena deja los choclos de la madre
y prefiere salir con los pirulines del vecino

vestida de doble de riesgo de
minnie la ratoncilla peluche
apelmazado nariz mocha un
moño a rayas dos
hilos de bigote caídos

las señoras siempre piensan que es un enano

y salen a la carga con sus máquinas
ninguna se da cuenta quién sonríe
adentro de la máscara al rayo del
solazo para las fotos
junto a sus hijos

2 comentarios:

Pablo dijo...

qué bueno, Joaquín!!! groso

Verónica Ruscio dijo...

Genial. Me pongo un sombrero para poder sacármelo ante vos.

Saludos.